ACOMPAÑAMIENTO AL DUELO, UN ESPACIO DE AYUDA Y ASESORAMIENTO
El proceso de duelo produce una alteración natural y necesaria en todo el sistema que nos permite adaptarnos a la realidad de la pérdida. Sin embargo, hay circunstancias en las que puede ser conveniente valorar la posibilidad de acudir a un profesional.
Esta decisión es totalmente personal, por lo que debe responder a la motivación, compromiso y conciencia de la necesidad de recibir ayuda.
Algunas de las situaciones en que las personas en duelo pueden necesitar ayuda serían:
abatimiento extremo
agitación prolongada
desesperanza (sentimiento que pase lo que pase el futuro ya no tiene sentido)
persistencia en la sensación de decaimiento
sintomatología física que pueda amenazar el bienestar: insomnio, pérdida de peso, dolores fuertes en el pecho …
pérdida de la funcionalidad en el día a día
fuerte sentimiento de culpa, rabia, venganza
ideas autolíticas
abuso de sustancias (caer en el consumo de drogas, alcohol …) como medio para paliar el dolor
conductas adictivas (juego, redes sociales …)
Todas estas respuestas pueden aparecer en los momentos iniciales del duelo como parte normal y natural del proceso. Ahora bien, es conveniente valorar la posibilidad de acudir a un profesional cuando todas estas respuestas se mantienen a lo largo del tiempo.
También podemos considerar la posibilidad de pedir ayuda profesional si en estos primeros momentos dolorosos sentimos que la situación nos desborda y que nuestra red de apoyo principal no acaba de dar respuesta a lo que necesitamos.